Un adiós que espero sea hasta siempre.

Entraste en mi vida cotidiana hace 12 años, antes ya te conocía, pero eras un compañero esporádico y en la mayoría de las ocasiones no venias solo, te acompañaba el culpable de que definitivamente te hiciera mi compañero fiel, ese que te convertía en mas divertido, en mas prohibido y por lo tanto mas interesante en aquellos años.
Pero poco a poco, fuiste dejando ese papel secundario, de acompañante imprescindible pero acompañante, para hacerte un hueco como protagonista y de esa forma entrar en mi vida hasta ahora.
Ahora que trato de decirte adiós es cuando soy mas consciente de lo importante que has sido, dejas un hueco que no se como tapare, cada día al salir de casa te recuerdo y al llegar también, siempre te tenia cerca para no perderte y sobre todo saber que estabas hay, cerca de mi, siempre dispuesto.
Pero después de todo este tiempo he decidido, que ya es hora de seguir adelante sin ti, tengo que decir que no tengo malos recuerdos que tratar de olvidar, al revés son todos buenos recuerdos y por eso se me hace mas difícil esto, pero espero que comprendas que en la vida todo tiene un principio y un final y creo que es un buen momento para llegar a nuestro final, ahora que todavía todo son buenos recuerdos, ahora que no tenemos nada que echarnos encara, ahora que el adiós es con cariño y no con desprecio, por eso mismo también te quiero decir, que segundas partes nunca fueron buenas, por eso espero que me ayudes para que este adiós sea un hasta siempre.
Siempre te llevare con los recuerdos de todos estos años, porque has sido parte de mí.
Hasta siempre.